jueves, 11 de enero de 2018

BOSQUE del Adelantado...


El área de Medio Ambiente del Cabildo de Tenerife anunció días atrás mejoras en el Bosque del Adelantado. 
Se trata de una actuación que estará centrada en trabajos de erradicación de la vegetación invasora para "preservar su biodiversidad y evitar la extinción de otras especies"...
Aunque no excesivamente conocido, el bosque integra dos hectáreas y media (25.000 metros cuadrados) y se da la circunstancia de que se encuentra muy próximo al casco esperancero. 
Tan cercano que se sitúa a unos metros del consistorio. 
Según cuentan, la denominación del entorno responde a que el adelantado Alonso Fernández de Lugo pasó por allí huyendo de los guanches y rumbo a su campamento, que había levantado en Añaza.

La acción que se va a llevar a cabo no es baladí; por la relevancia del lugar y por la necesidad de resolver el problema. 
Durante el pasado año recorrieron la zona el profesor emérito de Botánica de la Universidad de La Laguna Wolfredo Wildpret y el director del Instituto de Geobotánica de la Universidad de Hannover, Richard Pott. 
Este último, informó entonces el ayuntamiento en una nota, quedó "fuertemente impresionado" por el grado de conservación del bosque, si bien ambos expertos alertaron de que había presencia de plantas invasoras (la "crassula multicava", el acanto o la "chasmanthe aethiopica").
El comentario anterior de Pott no fue el único positivo. "Es uno de los mejores bosques primarios de Canarias", afirmó el profesor alemán, mientras que Wildpret señaló que, debido al tamaño de algunos ejemplares de laureles y brezos y a la ausencia de tocones, como pruebas de antiguas talas, se podría asegurar que "la mano del hombre nunca ha irrumpido en este bosque, seguramente porque las zonas más escarpadas eran de difícil acceso para talar los brezos, que antiguamente se usaban para hacer carbón".

Cabe indicar que en el municipio de El Rosario parte del monteverde -compuesto por las especies lauráceas y el fayal brezal- fue talado para utilizar el suelo con fines agrícolas y poblacionales, lo que le da, si cabe, una mayor relevancia a un espacio que apuntan desde el ayuntamiento que es el único reducto de laurisilva en un núcleo urbano de Canarias. Allí se pueden localizar laureles, brezos, viñátigos... junto a senderos interiores y varios puentes.

G.M.MONSECCA

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