El Cabildo estudia cobrar por usar los senderos y otro tipo de servicios básicos del Teide, como las exposiciones y rutas guiadas.
Es una idea que aún hay que analizar pero en un primer momento la institución se muestra "partidaria" de fijar una tasa con el fin "de mejorar la calidad de las actividades que se prestan".
Así lo indicó ayer la consejera de Medio Ambiente, Ana Lupe Mora, con motivo del 60 aniversario de la declaración de este espacio como Parque Nacional, que se cumplió el miércoles.La responsable de este área afirmó que esta propuesta deberá tratarse en el Patronato pero matizó que "si sirve para que las prestaciones sean más óptimas, se tendría en cuenta, porque no se cobrará por cobrar". El director del Teide, Manuel Durbán, tiene claro que esta medida "no solo ayudaría a generar ingresos, sino también a crear empleo verde en la Isla".
Al igual que Ana Lupe Mora, Durbán dijo que se trata de un planteamiento que aún hay que estudiar, pero indicó que afectaría solo a los servicios básicos que se prestan en el Parque Nacional. Según explicó, el recaudo por entrar al espacio natural no es posible todavía porque la ley vigente no lo permite, por lo que habría que modificar la normativa en caso de que se quisiera cobrar.
Por el contrario, sí está permitido pagar por actividades como el senderismo.
Durbán señaló que con la aplicación de tarifas se conseguiría que las actividades que se prestan tuvieran mayor calidad y espera que a lo largo de este año ya haya resultados al respecto. Las rutas guiadas y las exposiciones serían dos de los servicios que pasarían a cobrarse.
A éstas se suma la idea de los aparcamientos vigilados, según detalló Durbán. Comentó que uno de los problemas que se dan en el Teide debido a la aglomeración de visitantes son los atascos, que generan una "mala imagen".Durbán informó de que la posibilidad de cobrar por los servicios ya se ha hablado con los responsables del Cabildo, porque "parece que la competencia va a pasar a la institución", con el Patronato del Parque Nacional –del que forman parte los representantes insulares– y con el Gobierno canario, que es quien gestiona el Parque en la actualidad.
El director afirmó que el número de turistas en el Teide se incrementa de forma considerable cuando se producen nevadas y en un fin de semana pueden llegar a registrarse unas 80.000 personas, de ahí la necesidad de tomar medidas para que no se produzcan aglomeraciones y que los vehículos puedan estacionar.
El número de excursionistas que acuden cada año a ver el pico más alto de España, con 3.718 metros, ronda los tres millones anuales y se sitúa como el Parque Nacional más visitado del país, además de que también ocupa los primeros puestos a nivel europeo. El Teide, asimismo, resalta por ser el tercer volcán más grande del mundo desde su base en el fondo oceánico, solo superado por el Mauna Kea y el Mauna Loa, ambos en Hawái. Su altura, de hecho, convierte a Tenerife en la décima isla más alta del mundo.
Durbán hizo hincapié en la necesidad de prestar unos servicios de mayor calidad y detalló que son muchas las actuaciones llevadas a cabo desde 1971 con tal fin, "no solo para conservar la naturaleza sino también para hacer el espacio más accesible y que las visitas sean más agradables, siempre y cuando no se perjudique al medio ambiente".El Parque Nacional cuenta en la actualidad con 21 miradores y una red de senderos de más de 150 kilómetros. En total son 35 recorridos, 21 en la red principal y 14 en la secundaria, y los más destacados son el de la Fortaleza (de 5,3 kilómetros), Arenas Negras (7,6) y los Roques de García (3,5). Entre los logros conseguidos mencionó las rutas y espacios "adaptados para las personas con discapacidad".
Este espacio pasó a ser Parque Nacional en 1954, con la inclusión de unas 11.000 hectáreas de terreno, pero posteriormente se fue incrementando hasta alcanzar las 19.000 hectáreas de superficie protegida. Pese al aumento del área, Durbán indicó que aún quedaría una pequeña ampliación, como es la zona del campo militar de tiro, y algunas partes altas de Vilaflor.Aunque falta por proteger esas parcelas, el director considera que "básicamente" todo el matorral de cumbre ya está amparado por la normativa vigente. Como principales hitos mencionó su declaración como Parque Nacional (en 1954) y haber conservado el espacio con la eliminación de estructuras innecesarias, ya que "las urbanizaciones han acabado con recursos naturales importantes en otras zonas de la Isla", apuntó.
Algunos de los trabajos realizados durante este tiempo son la eliminación de pistas y carreteras, que eran "innecesarias" y afectaban al terreno, y de chabolas y refugios, además de la gasolinera que se encontraba junto al Parador.
Fuente : LA OPINION de Tenerife
24 Enero 2014
Saludos,
G.M.MONSECCA
